viernes, 23 de noviembre de 2018



¿Has visto a un paralelepípedo siendo atravesado por la luz?

En estado de levitación a trecientos noventa
y un
metros
de
matas de mango
lechosa
o sábila cultivada por ancianos
mil novecientas veinte
líneas rectas

            muy rectas

que decoraba con prendedores brillantes
de pavo real o alguna serpiente extraña de la India

sus columnas untadas de café y maíz tostado
nunca vieron a San Nicolás, pinos
o arlequines

su granito desconoce el arrullo
al niño custodiado por ovejas

Mil novecientas sesenta y cuatro veces
fue piscina

Mil novecientas sesenta y tres veces
fue pista de baile

Mil novecientos noventa veces fue alegría

miércoles, 10 de octubre de 2018




Querida salamandra
haz vuelto a casa

     tu casa

la de siempre


paredes humeantes
pasillos blanquecinos
incienso litúrgico
     regocijo  
alimento sagrado
llovizna


tus lunares
amarillos
esconden
el rostro de Cristo
la ansiedad del enfermo
ruegos al venerable


pequeña salamandra
haz vuelto a casa
tu casa
     la de siempre

viernes, 10 de agosto de 2018



Festín de hienas

Sin mediar palabras
estuve hacinado 
junto a 41 mortales
de aspecto desgarbado

La iluminación 
era escaza
como los recuerdos
de mi niñez 

Cuencas vacías
petulantes
podridas
proféticas 


      Carroña

Llamo a la madre
apoyado sobre un jergón
cundido de cucarachas
que martillan con sus patas
mi débil plegaria

Ríen
      muerden

hasta estallar
los huesos

Se quejan 
se cortan
se disparan 

      ríen

Y cuando el cielo
viste de gabardina negra
nos asechan con sigilo

      brisa de sangre

con un cuchillo al costado
y un rosario escondido

domingo, 23 de julio de 2017



Luces indecisas de su momento
campanas esperanzadoras
metales que se revelan 
 telas que pretenden ser flotantes


Todo parece estar vivo
 la ciencia nos ha mentido

El viento se asoma
 la rama se estremece

Los grillos no cantan
 hacen el amor 
bajo la luz de la luna 
cada viernes trece









miércoles, 18 de enero de 2017



La fragilidad vestida de papel moneda, que pretende socavar en la

 mente de los que tienen poca fe.

En la mente de los que dejaron de soñar. 

En los que ahora miran el atardecer, 

pero no observan la elasticidad de los momentos...






miércoles, 21 de diciembre de 2016



Hasta la luna salia a verte

Cuando vestida dejabas boquiabierto el ayer

Lleno de deseo

estaba el cielo oculto detrás 
de un kiosko pintado de azul.

Anhelando la fragancia de tu quietud


Suave el despertar 

Suave el momento 








domingo, 11 de diciembre de 2016




Ya no quiero seguir viendo tus pies descalzos desde  el balcón de mi habitación…

Allí, escondido, tímido e ingenuo… pasan lentas las agujas del reloj, como si esperaran por algo, ese algo que yo no sé.

Sentado en mi desván la lluvia me vuelve a alcanzar… yo trato de huirle, pero mis movimientos son inútiles, ella siempre sabe llegar a donde estoy. Llega en su momento exacto, sin previa cita.

Al espejo me miré… y allí te encontré, entre mis ilusiones y recuerdos, donde conviven la realidad y la ficción. ¡Se congelo mi corazón! Tu mirada habló por tus labios, ligero el paso del caballo cuando corre en libertad…

Sentí el momento tan mío, que tome unas hojas y escribí lo que sentía, ¡las huellas que dejo tu corazón! ¿Por qué aún las sentía? ¿Son tan firmes como el invierno es tan triste? ¿O tan superficiales como huellas en la arena? Que al más suave oleaje, se funde entre las sales.

En mis manos estaban tus huellas, tomé para mí las más bellas… las decoré con las flores menos comunes y las miré cada mañana con amor. Las cuidé para tenerlas conmigo siempre.

 Tus huellas imperfectas las eche al fuego… allí se consumieron nuestros pecados, nuestros errores, lo que no me dejaba seguir… entre cenizas quedo lo que sabemos tu y yo. Las llamas lavaron tus manos, acabaron con la soga que ataba mis brazos…

En su último suspiro me trajo la calma… bendigo tu alma.










viernes, 4 de noviembre de 2016




Rompió silencio, 

mientras el cielo espeso le hacia rechinar los huesos,

 en ese pobre intento de sobornar la realidad...

¿Es un trato? ¿O no es un trato?




 Preguntaré a mi conciencia antes que la tarde se haga fría y no 

halla mucho con que arropar...





lunes, 6 de junio de 2016


Encendía sus llamas y se volvía polvo frente a mí...

Escandaloso el humo que nos rodeaba en una especie de limpieza ancestral...

 Me llevaba a su mundo.

La marea, se hacia más... 

Y más en su espalda clara.

Sus pecas se volvieron mapas de rutas adornadas por rosas blancas y pieles deseadas...

Olvide la muerte, mi tiempo, mi miedo, mi ego...

Recordé mi libertad.





En cenizas vi mutar mi cuerpo 

Única salida, para sobrevivir al fuego vigoroso, al infierno celestial de su templo

Al amanecer, la sentí oler mis pieles 

¡Bendito sea el placer! 

Un Mesías dispuesto a sanar heridas del tiempo y del ayer



Le vi llorar, le vi reír... 

Le vi amar.